Un hombre a solas, finito,  
Usted, Martín, que ha perdido sus pasos
en una incansable nostalgia,
ebrio de sí nos dijo: Poesía se está callada…,
más de improviso todo cambió, 
y Dios, Barranco, la niebla sobre el mar, no existen, 
y usted no comprende
por qué los muchachos se han vuelto teas encendidas, 
gritan: ¡Cuba sí! 
rayan versos en las paredes del viento y velan
soñando la hora de golpear a la policía.
¿Se está callada poesía?
Martín, ella es una injuria
si no está en las rosas del mitin.  

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El poema que publicamos aquí con permiso de la familia salió en calidad de inédito en otoño de 1979 en la revista Juncalí, impulsada por Sandro Chiri, "el joven poeta no aficionado a los grupos", según Roger Santiváñez; fue en el número 2, dedicado exclusivamente a Sebastián Salazar Bondy (1924-1965). Esta revista es parte de la Colección Martín Adán en PUCP.

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